La población puede ser representada por pirámides de edades, existiendo tres tipos básicos: joven (o pre-reproductora), estable (o reproductora) y madura (o post-reproductora).
Una población joven está en rápida expansión. Una población estable presenta un equilibrio entre los nacimientos y las muertes. Una población madura cuenta con un bajo número de individuos jóvenes en comparación con los maduros.
Las curvas de supervivencia de una población expresan el número de supervivientes estimados en la densidad de una población a varios intervalos de edad.
Se ajustan a tres modelos:
- Curva convexa: Indica pocas pérdidas en las primeras edades y luego muchas en los individuos más viejos.
- Línea recta: Cuando el coeficiente de mortalidad permanece constante a lo largo de la vida. No es normal en la naturaleza, pero es el caso de la Hydra y de algunas aves.
- Curva cóncava: Se produce cuando hay una gran mortalidad entre los individuos más jóvenes como es el caso de muchas poblaciones vegetales y de invertebrados.